ETF VS. FONDOS DE INVERSIÓN: DIFERENCIAS CLAVE EXPLICADAS
Explore las distinciones estructurales, de costos y comerciales entre los ETF y los fondos de inversión tradicionales.
Similitudes clave
Tanto los ETF como los fondos de inversión:
- Ofrecen una exposición diversificada a la inversión
- Pueden gestionarse de forma activa o pasiva
- Permiten a los inversores acceder a diversas clases de activos
- Son productos financieros regulados
Diferencias principales
Las principales diferencias radican en la liquidez, los precios, los costes y los mecanismos de negociación:
- ETF: Se negocian a lo largo del día en las bolsas; los precios fluctúan intradía.
- Fondos de inversión: Se cotizan una vez al día; las operaciones se ejecutan al Valor Liquidativo (VL) al cierre del día.
- ETF: Índices de gastos más bajos; Pueden generar comisiones de corretaje.
- Fondos de inversión: Suelen conllevar comisiones iniciales, de salida y de gestión.
Por qué es importante
Comprender las diferencias fundamentales entre estos dos vehículos de inversión es esencial para elegir el más adecuado a sus objetivos, tolerancia al riesgo y plazo de inversión.
Estructura y Regulación de los Fondos
Los ETF están estructurados para cotizar en bolsas públicas, lo que les exige cumplir con los estándares de cotización y los modelos de creación de mercado que garantizan la liquidez. Suelen utilizar un estilo de gestión pasivo, con el objetivo de replicar el rendimiento de un índice de referencia como el FTSE 100 o el S&P 500. Sin embargo, existen ETF de gestión activa, aunque menos comunes.
Por el contrario, los fondos de inversión tradicionales suelen operar bajo una estructura fiduciaria o corporativa y están gestionados por un gestor de fondos o una sociedad de gestión de activos. Estos fondos suelen cotizar diariamente a través del Valor Liquidativo (VL) del fondo, que se calcula sumando el valor de las participaciones del fondo y dividiéndolo entre el número de unidades o acciones en circulación.
Enfoque de Gestión
- Fondos Activos: Gestionados por profesionales que toman decisiones de inversión con el objetivo de superar el rendimiento de un índice de referencia. Esto suele implicar altos costos de investigación y operaciones frecuentes, lo que contribuye a comisiones de gestión más altas.
- Fondos Pasivos: Estos replican un índice o segmento de mercado específico y suelen tener costos de gestión más bajos. Las estrategias pasivas están disponibles tanto en ETF como en fondos mutuos.
Transparencia de la Cartera
Los ETF ofrecen mayor transparencia en tiempo real. Sus tenencias se actualizan diariamente y están disponibles para los inversores. Los fondos tradicionales suelen actualizar sus tenencias trimestral o mensualmente, lo que los hace ligeramente menos transparentes en mercados con alta volatilidad.
Eficiencia Fiscal
Los ETF generalmente ofrecen una mayor eficiencia fiscal debido a su proceso de creación y reembolso en especie. Este mecanismo permite a los gestores de ETF intercambiar valores sin venderlos, evitando potencialmente la distribución de ganancias de capital. Los fondos mutuos, por otro lado, deben vender valores para cubrir los reembolsos, lo que puede generar ganancias imponibles para los inversores.
Consideraciones de liquidez
- ETF: Pueden comprarse o venderse rápidamente a precios de mercado en tiempo real durante el horario de negociación, sujetos al volumen y a los diferenciales entre oferta y demanda.
- Fondos de inversión: Solo se negocian al valor liquidativo (VL) de cierre del día, por lo que pueden ser menos adecuados para quienes requieren liquidez intradía.
Estructuras de costes
Los ETF suelen ser más económicos en cuanto a los gastos corrientes (conocidos como ratio de gastos totales o TER), especialmente para productos pasivos. Sin embargo, los inversores pueden incurrir en comisiones de corretaje al comprar o vender. Los fondos tradicionales pueden cobrar comisiones iniciales o de salida y gastos corrientes más elevados, especialmente los de gestión activa.
Perfiles de Inversor Más Adecuados para ETFs
Los ETFs son ideales para:
- Inversores autodirigidos: Quienes prefieren gestionar sus propias carteras pueden beneficiarse de la flexibilidad y la información de precios en tiempo real que ofrecen los ETFs.
- Inversores sensibles a los costes: Con TER relativamente bajos y sin comisiones por venta (si se utilizan plataformas sin comisiones), los ETFs pueden ser una opción atractiva.
- Inversores a corto plazo: La liquidez intradía hace que los ETFs sean adecuados para la asignación táctica de activos o estrategias de trading.
- Inversores a largo plazo: Especialmente los ETFs pasivos que replican índices globales pueden ser muy útiles para estrategias de compra y retención gracias a su eficiencia fiscal y bajas comisiones.
Perfiles de Inversor Más Adecuados para Inversores Tradicionales Fondos
Los fondos de inversión tradicionales son ideales para:
- Inversores que no se involucran: Quienes prefieren una gestión profesional y una negociación menos frecuente.
- Planes de inversión en el lugar de trabajo: Los planes de pensiones y los patrocinados por el empleador suelen utilizar fondos tradicionales debido a su simplicidad operativa y a los planes de contribución optimizados.
- Ahorristas habituales: Los planes de inversión mensuales con promedio de costo en libras suelen ser más sencillos a través de fondos mutuos.
- Necesidades de inversión a medida: Los inversores que buscan una asignación de activos personalizada o una gestión activa para obtener alfa pueden preferir los fondos mutuos.
Acceso e inversiones mínimas
Los ETF generalmente requieren que los inversores tengan una cuenta de corretaje y pueden adquirirse en unidades tan pequeñas como una acción. Son accesibles para inversores de todo el mundo, a menudo sin umbrales mínimos de inversión. Por el contrario, algunos fondos mutuos imponen niveles mínimos de inversión o restringen las clases de acciones a inversores institucionales o minoristas, según la jurisdicción.
Consideraciones geográficas
La disponibilidad y la tributación de los ETF pueden variar según la región. Por ejemplo, los ETF que cotizan en EE. UU. podrían no optar a ciertas ventajas fiscales del Reino Unido, como la inclusión en cuentas ISA. Los inversores del Reino Unido suelen recurrir a ETF UCITS, que se ajustan a la normativa europea y ofrecen un cumplimiento más amplio en el marco de las cuentas con ventajas fiscales.
Consideraciones finales
En última instancia, la elección entre ETF y fondos mutuos debe basarse en consideraciones como el horizonte de inversión, el apetito por el riesgo, la tolerancia a las comisiones y las preferencias de negociación. Ambas estructuras cumplen su función dentro de una cartera diversificada, y los inversores inteligentes pueden utilizar un enfoque combinado para lograr una amplia exposición, gestionando a la vez los costes y los requisitos de acceso de forma eficiente.